No todos los países presentan el mismo consumo por habitante
La población está creciendo de forma geométrica, imponiendo importantes exigencias a la base mundial de energía. Este crecimiento se produce en países que se están industrializando y que van a necesitar construir casas, hospitales, fábricas, puertos y todo tipo de instalaciones que caracterizan al mundo industrializado.
La experiencia de los países industrializados demuestra que sus ciudadanos, al disponer de energía, son más egoístas en su consumo per cápita. No sólo consumimos más energía porque seamos más habitantes, sino que la experiencia demuestra que la disponibilidad de recursos nos convierte en más egoístas en su consumo.