Las respuestas de la 2ª Ley
La 2. ª ley de la termodinámica es la que da respuesta a cuestiones tales como cuánta cantidad de un tipo de energía puede ser transformada en otro tipo de energía, y cuánta queda en forma de calor en ese proceso. Es la ley que explica cómo la energía, si bien no se destruye nunca, sí que va perdiendo su capacidad de convertirse en trabajo útil, como vimos en el anterior ejemplo. Aunque la energía del Universo nunca va a disminuir, sí que lo hará la capacidad de la energía para transformarse en trabajo.
Aplicando la segunda ley al conjunto del Universo, tenemos que partir de la teoría del Big Bang, que postula que el Universo comenzó con la explosión de una fuente de energía enormemente densa. A medida que esta energía densa se fue expandiendo hacia el exterior comenzó a perder velocidad y formar galaxias, estrellas y planetas. El Universo empezó con un orden completo y con altísimas temperaturas, y desde aquella no dejó de moverse hacia un estado más desordenado, enfriando paulatinamente y caminando hacia el equilibrio térmico. Esta idea es contraria a la concepción antropocéntrica de la historia terrestre, según la cual la evolución histórica de nuestra intervención para aprovechar las fuentes de energía nos permite conseguir más orden en menos tiempo y con más eficiencia. La segunda ley nos enseña que, en términos de escala del Universo, nunca ahorraremos tiempo ni ganaremos eficiencia utilizando mayores cantidades de energía, porque cuanto más rápido se consuma la energía del mundo, menos tiempo le quedará al Universo.